Nuevamente hoy, para todos los cofrades, comienza una nueva Cuaresma. Tas un año, como el que no quiere la cosa estamos en Miércoles de Ceniza. Ha sido larga la espera, contado los días, deshojando el almanaque para que comience esta cuenta atrás.
Cuarenta días para prepararnos y comenzar a disfrutar de la época del año que para muchos es la más importante, en la cual los sentimientos, las sensaciones y los sentidos inundan el corazón de deseo y esperanza que llegue un nuevo Domingo de Ramos. Poder dar rienda suelta a nuestro fervor religioso y cofrade. Con los cultos propios de cada hermandad, fijando como objetivos; la caridad cristiana, el recogimiento, la contemplación hacia Jesucristo. Protagonista de los días venideros.
Pero que no debería limitarse a estos cuarenta días. El sentimiento cuaresmal bajo mi punto de vista la deberíamos ejercer a lo largo de todo el año. Pero muchas veces nuestra atención se desvía del camino, que debería ser referencia, cada día de nuestra vida.
No pretendo ni mucho menos impartir Catecismo, ni una homilía al uso. Porque lo que he expuesto anteriormente, reconozco que debería aplicármelo a mí mismo en primer lugar; y predicar con el ejemplo. Aunque cada uno entiende la religión y la fe desde un prisma diferente.
¿Mas practicante? Puede ser que ese sea el secreto de un cristiano ejemplar cara a Dios y a la comunidad. Pero antes los ojos del Todopoderoso hay muchas formas de ejercer el sentimiento cristiano. Bajo el ejercicio diario de ayuda al prójimo, atendiendo al necesitado y como dijo nuestro señor en una de sus frases lapidarias “que tu mano derecha no sepa lo que hace tu mano izquierda”.
Pues bien cara a la galería, el estar en el templo a diario escuchando Misa o simplemente rezando, pasaria ante los ojos de todos como un practicante ejemplar. Pero sinceramente creo que eso no es solamente lo que espera Dios de nosotros.
Aparte de ejercer en la iglesia los mandatos eclesiásticos, hay que tener un compromiso fuerte con la sociedad. Y dentro de ella con los más desfavorecidos y necesitados. Ayudando al semejante ante las adversidades de toda índole. Que nos acucian desde hace mucho tiempo. Pero con la esperanza que saldremos adelante poniendo todos, nuestro granito de arena. Para superar lo antes posible esta situación tan asfixiante para todos.
Y para concluir, como el año pasado hiciera. Echando un vistazo al tiempo, y siendo optimistas. Se presume que podremos tener una Semana Santa esplendida. Así como el año pasado pintaban bastos, por la concatenación de temporales y que termino por deslucir por completo la Semana de Pasión. Este año el día de hoy ha sido de libro, para el lucimiento de todas las Cofradías en la calle.
Y sobre todo aquellas, que llevan varios años sin poder ver a sus titulares por las calles de nuestros pueblos y ciudades quedandose en el templo. A pesar de la climatologia que estamos sufriendo este año, totalmente el polo opuesto al que justamente hace un año teníamos.
Como dice el viejo dicho. “nunca llueve a gusto de todos”. Esperemos que la Cuaresma nos regale el agua tan ansiada por todos y llegado el momento brille un sol radiante para ver a Jesús y su madre María en sus distintas advocaciones y misterios emocionandonos a todos por cualquier esquina. Esperemos que así sea.
Alberto Fernandez Antunez
22 de Febrero de 2012
